El Ceuta se impuso al San Fernando en un buen partido de los
de Rafa Salcedo que se vio empañado por enfrentamientos
entre los dos equipos, cuando al término del choque ambos se
dirigían al túnel de vestuarios. Y es que los gaditanos no
encajaron bien los dos goles que el colegiado les anuló en
el segundo periodo, el último de ellos en el minuto 90.
Hasta entonces, el encuentro había trancurrido por los
cauces de la deportividad, y a pesar de que hubo varios
jugadores lesionados en ambos bandos, la contienda no estuvo
marcada por la dureza.
El primero en tener que retirarse fue el central ceutí
Hucman, pieza clave en el esquema de Rafa Salcedo, y que
acusó en un golpe a los quince minutos de partido los
problemas que tuvo durante la semana. Una baja que los
locales no acusaron en la lucha por hacerse con el control
de un partido que planteaba la batalla en el centro del
campo.
Las ocasiones se alternaban para ambos bandos, siendo las
más claras para los gaditanos que pudieron adelantarse por
mediación del delantero Alameda, quien se plantó solo ante
Pablo que sacó una mano milagrosa. La oportunidad espoleó a
los de Mariano Ayán, ya que solo un minuto después, Cabrera
volvía a encarar al portero ceutí, enviándola fuera.
Cuando peor lo tenían los caballas, y cuando parecía que
decaía el ritmo, se hicieron con el control del partido. La
velocidad de los visitantes contrastaba con el inferior
ritmo de los locales, que sin imprimir tanto dinamismo,
trenzaban jugadas de mérito.
Primero la tuvo Juanlu, al rematar desde fuera del área un
envío con intención que de ir con más fuerza se hubiera
colado junto a la cepa del poste. La segunda fue para Borja,
quien lanzó una falta a las manos de Jurado. Y cuando ya se
acercaba el descanso, llegó la tercera a balón parado, que a
la postre sería el gol definitivo.
Un córner, botado sobre el primer palo, sirvió para que
Ilias adelantara a los ceutíes que se marcharon al descanso
ventaja en el marcador.
El partido se reanudaría con un aparente dominio del San
Fernando, pero sin ocasiones. Ya que el peligro llegaba en
forma de contraataques de los norteafricanos. En uno de
ellos, cuando los de Salcedo atacaban en tromba, y tras
varios rechaces, el colegiado expulsó al visitante Cabrera,
dejando a los suyos con diez sobre el terreno de juego.
El hecho de jugar con superioridad numérica hizo confiarse
al Ceuta, que lejos de sentenciar el partido, se relajaron
hasta el punto de hacer peligrar el resultado.
Por su parte, el San Fernando, despertó al verse en
inferioridad y se fue arriba. Fruto de su ambición llegaron
los goles, que no subirían al marcador. El primero en el
minuto 76, tras saque de un córner, el árbitro anuló el
tanto por falta al portero. El segundo, y que encendió la
ira de los gaditanos, en el último minuto de partido, cuando
el colegiado señaló falta en el salto.
Después de esa acción, no hubo tiempo para más sobre el
terreno de juego, aunque la contienda siguió de camino a los
vestuarios. Un conato de trifulca que afortunadamente no
pasó a mayores.
Una victoria que sirve a los de Salcedo para sumar quince
puntos y situarse a siete del San Fernando.
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