Estoy harto de escribir sobre el
tema de las mentiras de la prensa y de la manipulación de la
información escrita y televisada, pero como este pueblo de
mercaderes mediáticos sigue sin enterarse de las mentiras
que cada día bombardea al ciudadano de a pie, voy a seguir
en el tema para que el pueblo no se deje engañara por lo que
los periodistas escribimos en la prensa. DESINFORMACION: “Es
la propagación (por la prensa, la radio, etc.) de
información falsa, con la intención de engañar a la opinión
publica”.
La libertad de expresión es el derecho de todo individuo a
expresar ideas libremente, por tanto sin censura, y siempre
bajo la mirada limpia de la VERDAD. La libertad de expresión
viene recogida en la Constitución de 1978 en su articulo 20,
siendo uno de los derechos que dispone de más garantías
jurídicas (recurso de amparo, recurso de
inconstitucionalidad, reserva de ley y aplicabilidad
directa, procedimientos sumarios en la jurisdicción
competente, difícil reforma del articulado en la
Constitución).
Siempre que escribo lo hago basándome en hechos reales y
verdaderos, que por no herir o ensañarme con determinados
elementos que tienen la osadía de vivir de la prensa o la
comunicación alterando permanentemente la información y
manipulándola con mentiras peligrosas para la convivencia de
la ciudad, no pongo en las paginas, pero sepan Uds. que si
vuelven a atacar el Estado de Derecho Democrático que nos
asiste sacare a la luz con las pruebas necesarias todo lo
que Uds. maldicen y envenenan. Vivimos en la Cultura del
Antihéroe por eso la MENTIRA pervive a la VERDAD, la gente
miente y el receptor del mensaje esta mas dispuesto a creer
la mentira que buscar la verdad.
Esta lucha entre la Mentira y la Verdad no es nueva, nació
con el hombre (La tentación de Eva y la Caída del Hombre).
Aristófanes en su incisiva obra, “Las nubes”, ilustra la
situación en que un argumento perverso y/o irracional puede
triunfar sobre otro con pretensión de verdad. Algo que los
sofistas conocían muy bien. Y es que a menudo, la
efectividad de un argumento depende más de la presentación
del emisor y de la capacidad crítica del receptor, que de la
veracidad de su contenido.
Acordaros del año pasado con la presentación de un medio de
comunicación de la ciudad de una interpretación falsa, falaz
y con intención de criminalizar a un colectivo el daño que
genero en la ciudad. Esta degeneración subjetivista de la
retórica también fue advertida -entre otros- por Sócrates.
En el Gorgias de Platón, afirmó que “o la retórica va
dirigida a los ignorantes y es extraña a la verdad, o se
inspira en la verdad y es peligrosa si se deja en manos de
cualquiera”.
|