El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla,
buscó la sede de su partido (PSOE) en Ceuta para explicar a
los medios de comunicación los acuerdo que ayer firmó con la
Ciudad Autónoma; una rueda de prensa que inició con una
frase de José Luis Rodríguez Zapatero -quien recaló en la
ciudad hace ahora un año- en la que se decía que consideraba
que “el primero de los deberes del gobernante es cumplir los
compromisos que asume públicamente”. Una decena de mese han
pasado de trabajo para llegar a la firma -de la que se
congratularon repetidamente- entre la institución estatal y
la Ciudad Autónoma.
A las palabras que con anterioridad, en el Palacio de la
Asamblea ceutí, había pronunciado sobre el acuerdo sumó
Jordi Sevilla su consideración: “un año después podemos
decir los compromisos que sumimos s están cumpliendo”.
En realidad, Sevilla volvió a apuntar las mismas
conclusiones que había expuesto antes de su reunión con los
sindicatos en la Delegación del Gobierno en Ceuta tras la
firma del convenio con al Ciudad; de hecho, el ministro cuya
cartera pertenece al Ministerio de Administraciones
Territoriales (MAP) -realmente una administración
transversal porque afecta a otros muchos ministerios-, para
el representante del Gobierno central “hemos hoy firmado
para poner a trabajar juntas las dos administraciones en
aquello que más importa, desde nuestro punto de vista en
Ceuta (políticas activas de empleo y políticas sociales).
“La idea de que las instituciones, quienes representamos a
todos los ciudadanos, no debemos confrontar si no que
debemos de cooperar y colaborar, es una idea que ha
presidido la actuación durante toda esta legislatura del
Gobierno” esgrimía el propio ministro en la sede de la calle
Daoiz de Ceuta.
El hecho de que la firma del convenio de hoy “inicia un
camino que no ha hecho más que empezar”, ha deambulado tanto
por las anteriores intervenciones de Sevilla como en esta
última.
“Yo no sé cuán importante es para los ciudadanos de Ceuta
ser o no comunidad autónoma, eso lo tendrán que decidir
ellos y valorar; la Constitución les reconoce esa
posibilidad, y por tanto no tengo nada qué decir” respondía
Sevilla a una pregunta sobre la perspectiva autonómica de la
Ciudad; “sé que eso debe hacerse con las mismas condiciones
que el Gobierno ha puesto para todas las reformas
estatutarias, y en este caso debe ser un consenso entre el
Gobierno de España y el Gobierno de la Ciudad, gobierne
quien gobierne en cualquiera de los dos, con amplio consenso
-también- entre los dos grandes partidos de ámbito nacional
que son, en definitiva, los que en el Parlamento van a tener
que validar todo con su voto para cualquier reforma
estatutaria”, no obstante, recalcó que “sí que sé a los
ciudadanos de Ceuta les preocupa dejar de ser el ‘farolillo
rojo’ en la tasa de paro del país, que les preocupa las
dificultades adicionales que tienen para acceder a una
vivienda, que se mejore -como se está haciendo- la atención
sanitaria o la educativa, y en eso es en lo que el Gobierno
va a centrar sus prioridades”.
Sobre la propia reforma del Estatuto ceutí, Antonia Palomo,
diputada en la Asamblea, respondía a las interpelaciones de
los medios de comunicación que “el derecho al autogobierno
lo tienen todas las regiones y los pueblos de España y
nosotros también, pero no podemos pedirle al Gobierno de la
nación lo que no arreglamos en ‘casa’, ya que las reformas
deben partir de los representantes legítimos que no han
podido llegar a un consenso, y por lo tanto la frustración
debe ser para el Gobierno de nuestra ciudad”.
En la sede
Finalmente, tras reconocer la propia Palomo que una de las
promesas electorales que no se han podido llegar a cumplir
ha sido la reforma del Régimen Especial Fiscal (REF), tal y
como han exigido empresarios y sindicatos en reiteradas
ocasiones; Sevilla y la diputada socialista ceutí dieron por
finalizada un encuentro mediático que, desde otros sectores,
han visto un apoyo a esta última ‘relativizando’ los rumores
que habían dirigido hacia la misma -tanto desde dentro como
desde fuera de su partido- que hablaban de la falta de apoyo
de la ejecutiva federal del Partido Socialista a la propia
Palomo.
Los hechos de ayer, suponían un respaldo presencial de
Sevilla para la política ceutí, quien desde que puso el
ministro de Administraciones Públicas su pie en Ceuta,
estuvo prácticamente en todo momento acompañado por Palomo.
Incluso los periodistas que han seguido el devenir de los
socialistas en la ciudad a través de los encuentro en su
sede, pudieron ver como en la última convocatoria habían en
la sala se había dotado de mayor infraestructura de luces y
sonido, lo que garantizaba la mejor presencia para esta
ocasión, que abre la llegada a más dirigentes nacionales.
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