La pasada campaña electoral que,
proporcionó el triunfo al partido socialista, aportó un
nuevo término a la vida política; “talante”. Ajustado a la
forma de gestionar por parte del partido socialista y seña
de identidad de su futuro gobierno. Señalaban un cambio
radical en las formas de gobernar respecto al anterior
gobierno del partido popular.
“Talante” demostrado en la Gala de los Premios Goya, donde
los actores y artistas progresistas lucían pegatinas de “NO
A LA GUERRA”, en las innumerables manifestaciones contra la
Guerra de Irak, creación de la plataforma “NUNCA MAIS” con
motivo del infortunado accidente del Prestige o los mensajes
a través de teléfonos móviles convocando concentraciones en
las sedes del partido popular el día de reflexión.
Y con ello, este término ha presidido todas las actuaciones
del gobierno socialista presidido por su precursor, José
Luis Rodríguez Zapatero durante su presidencia y, cuyo
máximo exponente, ha sido la negociación en el llamado
proceso de paz con ETA. En nuestra ciudad, ese “talante” ha
sido demostrado por el principal representante del Gobierno,
Jenaro García-Arreciado, en diferentes declaraciones y
actuaciones. Empezando con las declaraciones efectuadas con
motivo de las peticiones realizadas desde la Mesa por la
Economía enfrentándose con todas las centrales sindicales y
organizaciones empresariales, prosiguiendo con el
infortunado calificativo dirigido hacia el Presidente de la
Ciudad, Juan Jesús Vivas Lara, al que llamo llorón por
defender, ante el Gobierno de la nación, los intereses de
los ceutíes.
Pero, no queda aquí el “talante” demostrado por nuestro
actual Delegado del Gobierno. El pasado 26 de enero, con
motivo de la Festividad de Santo Tomás de Aquino, en la
Escuela de Magisterio, acompañando en la mesa presidencial a
las máximas autoridades, en un salón repleto de alumnos y
profesores, abandonó airadamente tan solemne acto al
escuchar el discurso crítico con la política educativa en
los últimos años, pronunciado por un experimentado profesor
universitario. Y, como en la obra Fuente ovejuna, todos los
socialistas acompañaron a Don Jenaro.
En definitiva, queda clara la disposición con la que los
socialistas realizan su gestión política si atendemos a sus
últimas actuaciones. Evidenciando un sectarismo abrumador en
total confrontación con el “talante” demostrado por nuestro
actual Presidente, del Partido Popular, Juan Jesús Vivas
Lara.
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