OPINIÓN - LUNES, 29 DE ENERO DE 2007

La Policía Nacional, exultante

Está que ‘se sale’, que diría aquel. La Jefatura Superior de la Policía Nacional puede mostrar orgullosa sus números de casos resueltos. La Brigada de Policía Judicial trabaja a destajo en todos y cada uno de sus áreas. Es una labor callada, apenas se ve, pero resulta realmente efectiva.

Desde la famosa UDYCO con todas sus funciones (drogas, crimen organizado, delincuencia económica...) hasta cualquiera de sus secciones en la estructura de la Jefatura Superior, la Policía Nacional se encuentra exultante gracias a los logros que se obtienen por ese trabajo diario y profesional que se encuentran llevando a cabo.

Del mismo modo que la crítica llega cuando se merece, no debemos caer en la injusticia y en el error de no resaltar la labor de cualquier organización cuando se realiza bien su trabajo y, sobre todo, con resultados dignos de destacar.

En este sentido, la Policía Nacional en la últimas 48 horas ha realizado dos actuaciones de mérito que resuelven dos acciones de carácter penal producidas en la ciudad. La primera de ellas, la resolución con detenciones de dos personas por fraude económico, por estafa continuada. Y lo ha resuelto con prontitud. En poco menos de diez días, la brigada de delincuencia económica ha puesto a disposición de la Justicia a un matrimonio que presuntamente estafa a un familiar.

Del mismo modo, y gracias a la rapidez de los agentes del 091, de los de Seguridad Ciudadana, se logró la detención del presunto autor de un crimen en la barriada Pasaje Recreo Alto, en la zona de Cortadura del Valle. Un asesinato en toda regla con el presunto asesino puesto hoy mismo a disposición judicial.

Mientras que en nuestro país resulta ‘barato’ penalmente delinquir -gracias a unas leyes en exceso benevolentes para según qué casos-, la Policía no desespera y continúa con profesionalidad dedicándose a detener delincuentes de todos los niveles.

Aún cuando en la calle y en concretos servicios, la Policía ande cortita de personal, la persecución de delitos, la información y la investigación en general son de primerísimo nivel.