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Ceuta se ha integrado en un red nacional de observación de
aves y mamíferos marinos, una iniciativa que surgió en 2005
en un foro gallego con la intención de desarrollarla en el
Cantábrico. Los representantes de la Sociedad Española de
Ornitología (SEO) en Ceuta se interesaron por participar y
la responsabilidad del proyecto, recae en esta ocasión,
sobre Joaquín López.
“Durante 2006 se han ido sumando diferentes ciudades de la
geografía española. En 2007, ya se ha extendido a toda la
costa mediterránea, se ha incluido Ceuta, Melilla, Las
Baleares, Portugal y Madeira”, explicó López. El método
consiste en un conteo de aves un día al mes a la misma hora
en los diferentes puntos de la geografía española y
portuguesa para estimar cuál es la población de aves, la
evolución, los movimientos, si aumentan o disminuyen - esto
es un proyecto que tendrá sus resultados a medio- corto
plazo-.
El objetivo primordial para los observadores ceutíes es
conocer las especies invernantes que hay, cuándo es el paso,
si existe un aumento o una disminución de especies en cada
época y elaborar un inventario actualizado de las aves
marinas que tenemos.
La experiencia
La organización del proyecto ha decidido que slas
observaciones se realizarán los primeros sábados de cada
mes, de 08:30 a 11:30 en la zona del Mediterráneo y de 09:30
a 12:30 horas en el norte y Portugal. La primera sesión de
avistamientos fue el pasado sábado 20 de enero, ya que se
retrasó la actividad por las fiestas navideñas. “Lo estamos
haciendo en Punta Blanca con el objetivo de que cuando enos
hagan las instalaciones podamos estar anillando unos y,
observando otros desde las torres, teniendo concentradas en
ese lugar todas las actividades”, apuntó.
López destacó la orientación de esa zona hacia el Estrecho
de Gibraltar donde toman un punto de referencia más amplio,
gracias al uso de telescopios. “Observamos toda la franja de
mar hasta el horizonte prácticamente. El paso no es tan
concentrado como en el recuento de pardelas en el
Desnarigado. Tenemos que abarcar más espacio”, dijo.
Durante la última sesión registraron el paso de unas 120
parduelas baleares, 90 alcatraces, patinegros, movimientos
locales, en definitiva, porque hasta finales de febrero no
se espera el gran paso migratorio. Joaquín López coordina un
grupo de unas diez personas y anima a las personas que
deseen participar en el proyecto a que sepongan en contacto
a través del e-amil caribes@epersonas.net o el teléfono 620
22 58 91.
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Con noticias de conductas anómalas
Uno de los miembros de la SEO en
Ceuta, Joaquín López, coincide con su compañero José
Navarretea a la hora de valorar los posibles efectos del
cambio climático en el fenómeno migratorio de las aves. No
existen estudios de años anteriores para comparar los datos,
aunque insiste en que se han constatado conductas anómalas
en algunas especies. “Sabemos que hay especies que están
criando antes, las cigüeñas no están emigrando, están
llegando especies a los humedales que no tenían que hacerlo
hasta la primavera”.
El paso migratorio de aves se desarrolla en el Estrecho
desde febrero hasta mayo. Si se adelanta este año, habría
una evidencia significativa de que el aumento de temperatura
está influyendo en el fenómeno.
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medio
ambiente / paso migratorio
