PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - DOMINGO, 28 DE ENERO DE 2007

 
OPINIÓN / CARTAS AL DIRECTOR

El Planeta Hercolubus

Por Jorge Pérez Blanca


Esta la tierra en peligro

El planeta Hercólubus penetró la órbita terrestre por última vez hace 13 mil años y habría causado el fin de la Atlántida. Ahora, estaría de nuevo acercándose a la Tierra con una misión tan defintiva como noble: purificar su aura de las malas energías. La única esperanza de evitarlo radica en el cambio de la humandidad hacia la luz. ¿Seremos capaces de detener la catástrofe?

"Un Asteroide Gigante Podría Golpear la Tierra en 2014" y "Tierra Bajo Ataque". Así titularon los sitios web de CNN y la BBC respectivamente hace pocos días. Se referían al asteroide 2003-QQ47, que con aproximadamente 1.066 m de ancho se dirige hacia nuestro planeta y podría impactarla el 21 de marzo del año 2014

Hercólubus

Aunque los espacios entre estos cuerpos y la Tierra son tan grandes que la frecuencia de los impactos no va más allá de una entre 909,000 de posibilidades, los astrónomos están atentos. Mediante programas como NEO's (por sus siglas en inglés: Near Earth-Objects, u Objetos Cercanos a la Tierra), se dedican a observar, rastrear y buscar asteroides que pudieran representar una amenaza para nuestro planeta observando diversas regiones del cielo. Cada vez que descubren uno, efectuan nuevas mediciones que permitan determinar su órbita preliminar, la cual se va ajustando con el transcurrir del tiempo y la acumulación de un mayor número de observaciones.

A diferencia del programa SETI (Programa de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre), que obliga a informar en el caso de encontrar señales de vida en el espacio, en programas NEO no existe regulación para dar a conocer un verdadero riesgo de choque de cometas o asteroides con nuestro planeta. Aunque la situación actual de 2003-QQ47 sólo permite indicar posibilidades de choque en base a una órbita muy preliminar, el peligro persiste.

Esta información impacta, pero es nada al lado de una amenaza mucho mayor. Una que no aparece en los periódicos. Una de la que pocos hablan. Una que se susurra en círculos muy cerrados, pero que a todas luces aparece como real. Se trata del aproximamiento del planeta Hercólubus, que muy bien podría ser el anunciado Apocalipsis para la humanidad. Ese momento fatal retratado en la Biblia en que todo rastro de vida será borrado de la faz de la Tierra. El tema no es nuevo, pero cobra vigencia porque el plazo estaría a punto de cumplirse. Según muchas profecías antiguas, este misterioso cuerpo celeste, también llamado Planeta Rojo, se vendría acercando peligrosamente a la Tierra con una inminente amenaza de exterminio de la vida humana. No debido a una colisión, sino a la acción de su gigantesco campo gravitatorio cuando pase cerca de la órbita terrestre. Al ponerse a la misma distancia a la que está el Sol de la Tierra y pasar por un ángulo de nuestro Sistema Solar, provocaría múltiples terremotos, maremotos, erupciones volcánicas y otras catástrofes cada vez más intensas, como mortíferas epidemias que nadie sabrá como curar, un calor intenso que secará los campos y la vida y provocará un hambre arrolladora, y una creciente oscuridad. Esto, a su vez, producirá desequilibrios mentales masivos y el desborde incontrolable de las masas humanas. El cataclismo final se produciría cuando el planeta alcance su mayor acercamiento a la Tierra, con el el vuelco de los ejes de rotación del planeta; el Ecuador se convertirá en Polos y los Polos en Ecuador. Los océanos, expulsados violentamente de sus lechos por estas fuerzas cósmicas, sumergirían al planeta entero.

¿Qué hay de cierto y cuánto de mito en este vaticinio?

La información sobre el Hercólubus es escasa y dispersa, incluso contradictoria, y como muchos asuntos de esta índole ha sido desvirtuado hasta la saciedad con pronósticos falsos. Pero aunque nadie tiene la verdad absoluta, hasta las investigaciones más "científicas" y "serias" apuntan a que realmente existe. Se trataría del mismo planeta que, según el astrónomo Joseph Lando, causó el trágico fin de la Atlántida al completar su órbita anterior hace 13.000 años, cuando penetró por última vez nuestro Sistema Solar y desvió el eje terrestre. Perteneciente a la constelación de Orión, Hercólubus sería varias veces más grande que Júpiter -el cuerpo celeste de mayor tamaño de nuestro sistema solar-y presentaría órbita y cola de cometa, y masa de planeta. Se dice que forma parte del sistema solar de dos estrellas, una brillante y otra oscura, y que viaja en una órbita extremadamente elíptica y perpendicular a la Tierra alrededor de nuestro Sol y de otro sol muerto o negro. Oscuro y frío, se encontraría aún en un primitivo estado de evolución

La distancia máxima de Hercólubus al Sol es de 400 o 500 unidades astronomicas (1 u.a.= distancia de la Tierra al Sol), y su distancia mínima es de unas 4 o 5 u.a. (entre el Cinturon de Asteróides y Júpiter). Le lleva 6.600 años terrestres recorrer una órbita elíptica en torno de nuestro Sol haciendo un lazo sobre los planetas exteriores, y por encontrarse la mayor parte del tiempo demasiado lejos del Sol es difícil detectarlo. A esto se une el que el planeta esté aparentemente compuesto por un material que absorve la luz y dotado de una especie de capa infraroja artificial que le ayuda a preservar el calor y lo mantiene fuera del espectro visible. A diferencia de un agujero negro, Hercólubus no succiona la luz, sino que apenas la refleja, pero por su enorme tamaño y su progresivo acercamiento a la Tierra pronto será visible a simple vista, y el efecto que se espera sería igual de catastrófico que el que experimentó la Atlántida hace milenios.

La desparición.

Luego del desastre, Hercólubus sería la nueva morada a la que serán trasladados aquellos seres humanos que no hayan alcanzado los niveles energéticos vibrtatorios necesarios para ingresar a la cuarta dimensión a la que pronto pasará la Tierra, y donde iniciarían un nuevo plan evolutivo.

Los Mayas y la Biblia lo Anunciaron

Una las bases sólidas en las que se apoya la existencia de Hercólubus son las Profecías Mayas. Aunque no mencionado con ese nombre, está presente prácticamente en todas ellas, que culminan el año 2012 con el advenimniento de una humanidad armónica y feliz, plenamente conciente de lo que ES, que vibra en amor y nombra sus representantes para la Confederación Galáctica, en una nueva etapa donde ayudará a evolucionar a otras humanidades de la tercera dimensión.

La primera referencia al Hercólubus que hacen las profecías mayas es para el año 2005, vaticinando el aparecimiento de un nuevo planeta que producirá cambios electromagnéticos y gravitacionales en la Tierra, generando un caos generalizado al aumentar la actividad del polo negativo terrestre. Para el 2006, cuando ya la humanidad esté bien diferenciada entre quiénes trabajan por la Luz y quiénes por la Oscuridad, el nuevo planeta se instalará en la órbita entre Marte y Júpiter generando aún un mayor caos mundial donde el hambre será la gran protagonista. Al cambiar el eje polar de la Tierra abundarán los maremotos y movimientos sísmicos y volcánicos. Para el año 2008 el planeta ya habrá realizado ajustes orbitales en la Tierra y el clima y la geografía serán totalmente distintos.

Los siguientes pasajes de la Biblia también entregan abundantes referencias sibre el nuevo planeta: "Cuando vieras el Abominable devastador que fue profetizado por el profeta Daniel ubicado en el Lugar Santo entonces los que se encuentren en Judea huyan hacia los montes (Mateus 24: 15-16) ; "En toda la Tierra, dice el Señor, dos tercios serán eliminados, y perecerán; pero la tercera parte quedará en ella" ( Zacarias,13:8) ; "Haré pasar a esa tercera parte por el fuego y la purificaré,como se purifica la plata, y la probaré como se prueba el oro...."

(Zacarias,13:9); "Y el cielo se apartó como un libro que es envuelto y todo monte y las islas fueron movidas de sus lugares" (Ap. 6: 14); "Y los reyes de la tierra, y los príncipes, y los ricos, y los capitanes, y los fuertes, y todo siervo y todo libre se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes" (Ap. 6: 15); "Y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos de la cara de aquél que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero (Ap. 6: 16); "Porque el gran día de su ira es venido; ¿y quién podrá estar firme?" (Ap. 6: 17); "Los tiempos del fin ya llegaron, y estamos en ellos. "Muchos son los llamados y pocos los escogidos" (Mateo 20: 16).

¿Qué Sabemos del Planeta Rojo?

La historia del Hercólubus se remonta a mucho antes de los Mayas. En el legado de las más antiguas y diversas tradiciones y culturas se menciona constantemente un astro que visitaría la Tierra periódicamente, cada cierta cantidad de milenios, y que ha sido bautizado como Planeta X, Ajenjo, Marduk según los babilonios y Nibiru según los sumerios, que hablaban de un planeta cuya órbita se extendia por otros sistemas solares y que pasaría cada 6.666 años´por la Tierra, y que era habitado por la civilización de los Anunnaki o Nefilin, que utilizaban la órbita singular del planeta como un observatorio en movimiento.

Más recientemente se lo a denominado Hercólubus o Hercóbulus. Pero en lo que sí existe concenso es en que la aparición de este cuerpo coincide milenariamente como el fin de las civilizaciones. Vendría a ser una especie de filtro o catalizador que cada cierto tiempo purifica y limpia la Tierra de las impurezas con que los seres humanos la contaminan, dando paso a nuevas eras. Cada pasada del Hercólubus sería un nuevo Apocalipsis para la Tierra. Pero para cada civilización sería el único.

Pese a lo falseado de muchas informaciones y del manto de silencio y censura que oficialmente se intenta desplegar en torno al tema para evitar el pánico, se afirma que los astrónomos detectaron al planeta hace más de 20 años, y que la preocupación en los medios de inteligencias de Estados Unidos es enorme, ya que Hercólubus estaría llegando a Plutón. La principal base en la que se afirman las hipótesis para creer que hay un "algo" extraño dando vueltas es la curvatura de la luz alrededor de la masa planetaria, debido al gran poder gravitacional que ésta tiene. En 1980, el periódico O Globo de Brasil informó que las sondas Pioneer 10 y 15 buscaban un supuesto planeta X que con su fuerza gavitatoria alteró las órbitas de Neptuno y Urano.

Según el astrónomo Joseph Lando, los cometas comunes como el Hale-Bopp alcanzan su velocidad máxima al circundar el Sol (unos 30km/sec) y su velocidad mínima en el punto más lejano del sol (unos 2 km/sec) a unos 36,000,000,000 km de distancia. El Hercólubs, en cambio, no se comporta de esta forma porque está orbitando dos estrellas, y su velocidad máxima la alcanza justamente en medio de ambas.

Extraido de la web formarse.

Autor: Alejadra Bluth Solaris
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto