Es increíble que en los tiempos que corren aún queden
políticos incultos y bocazas que califiquen a Ceuta como una
ciudad pseudocolonial, es increíble que haya un
“pseudopolítico” que opta a la presidencia de la nación
española y se permita la chulería de insultar a más de
75.000 españoles que viven en esta ciudad, pero no menos
increíble es que su partido (Izquierda Unida) se presente en
las municipales si piensan que somos una colonia ¿Qué hacen
cediendo sus siglas al Sr. Musa?, y decimos ceder, porque
seguramente IU nunca haya apostado por Ceuta, en nuestra
ciudad es un partido en decadencia, y prueba de ello es que
no se dignaron a ayudar desde la sede nacional en la
financiación de las anteriores elecciones municipales.
No se puede entender que haya ceutíes a los que le queden
ganas de defender esas siglas. Con qué cara se presenta como
candidato a la presidencia de la ciudad, a la cual el paleto
de su jefe califica como colonia. Y decimos paleto porque
ignora la historia que precede a Ceuta. El Sr. Musa debe
tener la cabeza metida bajo tierra como las avestruces para
aguantar el chaparrón que le está cayendo, provocado por su
coordinador general. Si tuviera un mínimo de dignidad,
abandonaría su partido sin pensarlo dos veces, pero nos
parece que el ansia y la ambición de tener la posibilidad de
poder optar a un escaño le supera. Tampoco duda en
descalificar con mucho arrojo al presidente de nuestro
partido refiriéndose a su pasado unido a la iglesia con un
tono peyorativo, ¿Dónde está ese arrojo para callar a su
superior? ¿Por qué no tiene la valentía necesaria para
defender a un pueblo al que pretende representar? ¿Es sumiso
a las ordenes de Madrid?
Este partido parecía defenestrado por los votantes y además
con razón, pero de repente, y por sorpresa para muchos,
llega el salvador, el Sr. Alí, líder de la UDCE. Esta
extraña coalición la justifica como moderna y progresista, y
con ella pretenden quitarse carteles y estigmas que dicen se
le han colocado, pues bien, al intentar dar otra imagen (o
lo que quiera que intenten hacer) han metido la pata, se han
equivocado de aliados. En qué cabeza cabe que un partido
local forme coalición en las elecciones con otro nacional
que si por él fuera y tuviera la oportunidad se plantearía
entregar las ciudades de Ceuta y Melilla al país vecino.
Esta unión política no tiene ni pies ni cabeza desde
múltiples aspectos y que muchos conocen pero que no son
quien los tiene que valorar. Ahora bien, lo que si es
preocupante, es que el Sr. Alí continúe con esta coalición,
puesto que por el camino que va no se sabe hasta donde puede
llegar.
El líder de la UDCE se ha caracterizado en su primera
andadura política por pedir dimisiones, aclaraciones y
explicaciones hasta por lo más mínimo, dejando caer siempre
la sombra de la duda sobre una buena gestión. Sería bueno
que esas mismas explicaciones que ha pedido al Partido
Popular durante casi 4 años, se las pidiera ahora a IU. Pero
claro, como pretenden que sea su portavoz en el congreso
esta dispuesto a sacrificar el orgullo de los caballas que
les confiaron su voto, por dos intervenciones parlamentarias
al año que les sirven para ocupar paginas en la prensa.
El refranero español es sabio y desde siempre se ha dicho,
“Dime con quien andas y te diré quien eres”. Si el Sr. Alí
se presenta a las municipales de la mano de quien nos
califica de pseudocolonia, puede que los votantes piensen
que comparte sus afirmaciones y si así fuera serían la peor
opción política. Esperamos que no sea un cobarde y que la
misma insistencia que ha mostrado en contra del presidente y
del consejero de presidencia, simplemente porque este último
no le cae bien, la muestre contra Gaspar Llamazares para que
rectifique y pida perdón a los miles de caballas que se han
sentido ofendidos.
Estamos en precampaña y su coalición ya se está metiendo en
líos, no queremos ni pensar a que extremos se llegaría sí
consiguieran la presidencia de la Ciudad, seguramente se
asemejaría a abrir la caja de los truenos. Deseamos que
encuentre la manera de que su socio político se disculpe,
aunque dudamos que lo consiga Esta extraña coalición no ha
empezado con buen pie, y ya se sabe “lo que mal empieza, mal
acaba”.
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