Los continuos retrasos en la puesta en marcha del servicio
único de emergencias del 112 se han convertido en el último
motivo de crítica del PSOE de Ceuta hacia el Gobierno que
preside Juan Vivas que, según el secretario de Movimientos
Sociales del partido, “vuelve a poner en la palestra la
nefasta gestión de un PP que ha despilfarrado millones de
euros procedentes del Proyecto Ciudad Digital”.
Según señala Gonzalo Sanz en un comunicado, este proyecto de
carácter estatal ha inyectado en la ciudad 4´3 millones de
euros mientras que el Gobierno autónomo ha destinado sólo
1,87 millones y todo este montante ha sido malgastado “en
catorce ejes que deberían haber transformado la ciudad,
haciendo de ésta un verdadero ejemplo a seguir en cuanto a
modernidad por el uso y acceso de los ciudadanos a las
nuevas tecnologías”.
“El Estado ha invertido en Ceuta casi 1000 millones de
pesetas entre Ciudad Digital y el Plan Avanza para convertir
a Ceuta en una ciudad modelo -ha dicho Sanz- sin embargo, el
Ejecutivo local ni ha cumplido con los objetivos ni ha
logrado que este dinero revierta sobre el bienestar de los
ciudadanos”.
El 112 es un proyecto que ya está en marcha en numerosas
ciudades españolas y que concentra en un sólo número de
teléfono todos los servicios de emergencias que se prestan a
la ciudadanía de tal modo que ésta sólo tiene que memorizar
un número para ser atendido de inmediato ante cualquier
eventualidad. Para Sanz éste es un proyecto “faraónico” que
tiene un coste superior a los 200 millones de pesetas y que
está “mal concebido y peor acabado”. Según explica ha sido
costeado en parte “de manera totalmente arbitraria con el
dinero que el Ministerio otorgaba para una línea 010 de
atención al ciudadano” y añade que el sistema 112 es una
obligación para todas las ciudades según la Directiva
Europea 91/396 desde 1991 y tal y como establece el Real
Decreto 903/97. “Dieciséis años después, Ceuta aún no cuenta
con su 112, y lo que es peor, todo parece indicar que su
puesta en marcha, aún a pesar de que se prometió para
comienzos del 2006, queda todavía lejos. De hecho, el
callejero digital, instrumento indispensable para el 112 y
promesa anunciada hace años, aún no ha visto la luz”,
afirma.
“Las quejas de un colectivo de trabajadores a los que la
Ciudad niega un marco laboral estable, las imposiciones a
policías y bomberos que ya han mostrado sus quejas por
ningunearles y la inaudita ausencia de coordinación con los
servicios de urgencia dependientes del Estado son sólo
algunos de los regalitos con que nos ha deleitado el
gobierno de Vivas con un proyecto tan serio y necesario para
la Ciudad. Un 112 que, si nadie lo remedia, nacerá como una
verdadera chapuza que puede llegar a convertirse en una
verdadera temeridad al lanzarse, sin seriedad y concreción,
a la nada baladí tarea de gestionar las emergencias en
nuestra ciudad”, afirma con rotundidad.
“El 112, al igual que el inexistente Servicio de Protección
Civil, son, para el Gobierno de Vivas, dos áreas de tremenda
opacidad y secretismo tanto para los grupos parlamentarios
como para la opinión pública. Mientras todo lo ofertado por
un servicio tan esencial como la Protección Civil se limita
a cuatro viñetitas de corta y pega en un periódico, el 112
amenaza con incurrir en serias irresponsabilidades en la
gestión de unas emergencias que deberían haber contado con
la coordinación de la Delegación del Gobierno y que deberían
haber escuchado a todos los agentes implicados, a quienes se
ha negado su participación, por lo que no es de extrañar que
hasta los propios futuros agentes de sala muestren su
indignación”.
Para concluir, Sanz se ha quejado de la “deslealtad” del
Ejecutivo autónomo a la hora de presentar todos aquellos
proyectos cofinanciados por el Estado “para presentarlo como
logros propios”.
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