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Muchas han sido las razones que ha esgrimido la Consejera de
educación y Cultura, Mabel Deu, para salir al paso de las
críticas que estos días apuntaban a una mala gestión en la
contratación de la pista de hielo de la explanada de la
Marina. Antes de nada, quiso dejar claro que tanto ella como
cualquier miembro de su equipo, están “a total disposición
de quien tenga alguna duda” sobre la legalidad y correcta
gestión de un servicio que calificó de “apuesta personal
para la diversión del pueblo de Ceuta”, sin querer entrar en
ninguna polémica política. “Este tipo de declaraciones sólo
pretenden sembrar dudas y poner en evidencia el trabajo de
mucha gente”, dijo.
Los motivos para la diferencia en el coste de la instalación
de La Marina los justificó la consejera por la necesidad de
acudir a subcontratas que supliesen la escasez de
estructuras y medios para su instalación y mantenimiento en
la ciudad de Ceuta, estructuras con las que sí pueden contar
en la ciudad hermana, como las que se refieren al
transporte, instalación de la carpa (absolutamente necesaria
por la alta humedad de Ceuta), carga y descarga, seguridad y
el servicio médico de urgencia. Recursos que no se tienen y
que encarecen el precio.
Todas estas subcontratas han resultado, por otro lado,
inversiones para la ciudad autónoma, puesto que todas se han
realizado a empresas ceutíes. Así mismo, explicó que el
tamaño de la pista ceutí es sensiblemente mayor (20 x 30 m.)
que el de la melillense (10 x 30 m.), y que para su cuidado
y explotación la empresa arrendadora ha contado también con
gente de Ceuta.
Por lo que respecta a la prórroga en el tiempo de alquiler,
Mabel Deu especificó que no se trató de una prórroga
entendida como tal, sino de una propuesta inicial para que
los ceutíes pudieran disfrutar durante más tiempo de la
pista, por lo que ya estaba estipulado de antemano en el
contrato. A este hecho hay que añadirle que la intención
primera de la supuesta prórroga era que hubiese días de uso
gratuíto para niños y personas con escaso poder adquisitivo,
de los cuales han asistido hasta el 15 de enero hasta 1.500
sin pagar el billete.
“Los supuestos 50.000 euros de más respecto al coste de
Melilla están aquí, en Ceuta” apuntó la consejera, que quiso
así destacar que la inversión realizada en la ciudad
derivada de las subcontratas para montar la pista
compensarán con creces el gasto realizado, y ese dinero
supera a la recaudación y todos los gastos derivados de la
instalación.
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Poner los puntos sobre las íes
La mañana iba a dedicarse a la
presentación del programa cultural de la ciudad para los
próximos meses, pero una vez se cumplió con el orden del
día, Mabel Deu quiso salir al paso de la denuncia en la que
el PSPC afirmaba que la pista de hielo de La Marina costaba
al bolsillo de los ceutíes el doble que a los melillenses, y
ponía en duda la gestión del presupuesto por la consejería
autonómica.
La consejera no esperó y comenzó a explicar con claridad
meridiana la gestión de la operación y a defender la
actuación de su equipo de posibles ataques sin
justificación. Se puso a disposición de quien tuviera dudas
y ahorró a los plumillas que allí parábamos las preguntas,
ya que ella supo preguntarse y solventar todas las dudas que
pudiesen haber.
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Ocio / Polémica
