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«Se llama Iberia a la parte que cae sobre nuestro mar, el
Mediterráneo, a partir de las columnas Heracleas. Mas la
parte que cae hacia el mar exterior, el Atlántico, no tiene
nombre común a toda ella, a causa de haber sido reconocida
recientemente». Estas palabras provienen de Polibio, un
historiador griego del siglo II antes de Cristo, del cual
bebe directamente el gran Estrabón. Parte del mito de las
columnas de Hércules se erigió ayer en la ciudad autónoma.
El autor de las esculturas, Ginés Serrán, supervisó en todo
momento la colocación de la helenística figura, que según
explicó el artista, portará dos llamas olímpicas que se
podrán encender dependiendo de las condiciones
climatológicas. Se activarán mediante corriente eléctrica y
un material incandescente especial que se mantiene
encendido.
“La idea de esta escultura es que mire al Estrecho, la otra
mira a la ciudad y así no dan las dos la espalda a la
ciudad. Una de las esculturas representa la mitología
clásica, la separación de los continentes y la unión de los
mares, es un mito universal, conocido en todo el mundo. La
otra es una interpretación más personal sobre la unión del
mundo, de los continentes y no es una columna que los separa
sino que los une. Es solamente una interpretación”, indicó.
El esfuerzo físico del Hércules de Serrán recuerda a las
grandes obras del periodo clásico. La composición confirma
que Serrán ha estudiado a Lisipo, Praxíteles, Fidias, entre
otros muchos. “Es una figura atlética, pero el rostro es,
sobre todo, más representativo de lo que era el Dios
Hércules”, apuntó.
Perspectiva
A simple vista da la sensación de que los Hércules son más
pequeños de lo que se había anunciado en un principio. A
pesar de esto mantienen sus siete metros de altura sobre un
pedestal de cinco. Serrán matiza el hecho de que la
perspectiva es “diferente según la distancia” comparando la
apariencia del enclave ceutí con “lo pequeño que parece la
Estatua de la Libertad, -que tiene 60 metros- desde
Manhattan. “La gente tiene que ir con barcos, de la misma
forma que vendrá la gente a visitar a los Hércules, es una
atracción turística pero la perspectiva es así”.
Ceuta hercúlea
“Es un símbolo muy importante, desde Australia hasta Tierra
de Fuego se sabe que las columnas de Hércules son el monte
Abyla-monte Hacho y Calpe. Y teníamos que tener este
elemento cultural aquí. Yo apuntaría que esto es una
necesidad para la ciudad. Creo que esto no son estatuas sino
símbolos de la historia de la ciudad, que es una cosa muy
importante. No son elementos decorativos, nos pertenecen a
nosotros y a nuestra historia”, explicó Serrán.
El autor de las esculturas hizo hincapié en la necesidad de
apartar su obra de la arena política. “Son elementos que no
deben politizarse en absoluto. La política no debe jugar con
el patrimonio cultural de un pueblo. Son elementos que nos
son inventados ni son ajenos ni extraños a la historia de
Ceuta. Son elementos que pertenecen a Ceuta. Entonces es una
necesidad, es algo intrínseco a nuestra historia. Y luego
que hagan lo quieran con ella, si quieren explotarla
turísticamente. En ese sentido discrepo con algunas personas
que intentan politizar, si esto lo necesitamos o no. Esto es
parte de nuestra historia. Esto no se puede discutir, es un
legado cultural de todos los ceutíes”, sentenció.
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patrimonio / mitología
