|
Estoy francamente preocupado con
las declaraciones del Presidente. Todavía no he visto en él
un ápice de humildad, y cuando esta cualidad falta en
alguien que tiene la máxima responsabilidad en la dirección
y el gobierno de los destinos de nuestra PATRIA, la
situación futura de la misma puede ser bastante
desestabilizadora. Humildad para el día del atentado haber
proclamado públicamente que rompía toda relación con ETA y
con su aparato político Batasuna.
Humildad para desde la responsabilidad que encierra ser el
líder político de ESPAÑA, haberse quedado en Madrid y
dirigir desde su sillón de presidente cualquier operación de
seguridad, trabajos de desescombros, aparición de los dos
cadáveres, ruedas de prensa a nivel personal, comunicados,
órdenes a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para
apresar al comando que pusieron el explosivos y los que
todavía están latentes, acechando, en la nevera, esperando
dar el próximo zarpazo.
Humildad para reconocer los errores que ha cometido al
fiarse mas de la banda terrorista que de sus servicios de
información oficiales-“aseguró que 'no hay ningún aspecto
que permita decir que ha habido algún error' en el Gobierno
respecto al atentado del sábado”-. Humildad para no dejar en
ridículo a su numero dos en el Partido-“Ante las palabras
del secretario de Organización del PSOE, José Blanco, en las
que ayer reconoció la posible existencia de algún error,
Zapatero dijo que ha hablado con él y éste la ha comentado
que ha podido haber alguna mala interpretación de sus
palabras o él se explicó mal”-. Su mas ferviente adalid de
la izquierda comunista le ha recriminado su orgullo:
“También el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares,
lamentó hoy la 'resistencia' del presidente del Gobierno a
asumir 'ningún tipo de error' en el proceso de paz y le
advirtió que 'no debe aspirar a ser infalible'.
Humildad para reconocer que no tenia toda la información
necesaria, porque si así hubiese sido no se hubiera mojado
el día antes “hoy estamos peor que mañana”,- “Zapatero
subrayó que el Gobierno ha tenido en todo momento la
información que razonablemente ha podido tener de ETA y
defendió la profesionalidad de todos los servicios que
tienen que ver con ese tipo de información”.
Humildad para decir públicamente que no habrá otro proceso
de paz con ETA, pues de sus palabras se deduce que va a
seguir intentándolo- “Asegura que va a seguir en su empeño
de acabar con la violencia e insiste en que solo se consigue
si se intenta”- y prosigue diciendo ante la posibilidad de
abrir una vía de dialogo con la banda- “Ese, dijo, es un
debate para otro momento”-. Otro momento puede ser otra
bomba similar pero sin avisar, es decir miles de muertos…de
los que no llevan escolta, ni escáner en los coches.
Trabajadores indefensos.
|
OPINIÓN / SIN MIEDO
