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OPINIÓN - MARTES, 02 DE ENERO DE 2007

 
OPINIÓN / COLABORACIÓN

Seguridad y Miedo (I)

Por Jorge Pérez Blanca


He estado hablando de temas tan importantes como el “Proyecto de creación de una Unidad Especial Contraterrorista”, que nunca se ha llevado a cabo, y que por el sistema de prioridades que hasta el día de la fecha han ejecutado los diferentes gobiernos que han mandado en nuestra maltrecha democracia, tampoco la harán en un futuro; así como de las medidas de Autoprotección contra el terrorismo que a lo largo de cinco capítulos he difundido en la prensa.

Como creo que la situación de España después del atentado que hemos sufrido hace un par de días, y la orientacion que está experimentando Marruecos en referencia al aumento del islamismo radical, especialmente de corte Salafista, voy a seguir hablando de algo, como es la SEGURIDAD, que para la vida de las personas, de la ciudad, de nuestra PATRIA, y de Ceuta es fundamental.

Como consecuencia de la línea que estoy siguiendo de concienciar a los ciudadanos sobre una serie de problemas que la vida diaria nos depara, y siendo el más importante entre ellos, el de la SEGURIDAD CIUDADANA, voy a abrir otro frente sobre este tema, porque no cabe duda que Ceuta es una ciudad con grandes lagunas y carencias sobre SEGURIDAD. La falta de seguridad ciudadana ha pasado a ser en los últimos tiempos uno de los temas centrales de preocupación de los ciudadanos y, por lo tanto, una de las cuestiones a resolver por los responsables políticos de principios de este siglo.

De este modo, Kris Bonner dice: El interés de la población que hace referencia a la delincuencia ha aumentado enormemente en los últimos años. La seguridad es una condición necesaria para el funcionamiento de la sociedad y uno de los principales criterios para asegurar la calidad de vida.

La crisis de la seguridad y su correlativa necesidad de reforma (a pesar de su importancia y de la necesidad de un debate en profundidad) han conducido a que, en ocasiones, desde los ámbitos de gobierno se formulen recetas simplistas para actuar sobre los síntomas y no sobre las causas. Sin embargo, la bestia inmortal, tiene un talón de Aquiles, se puede acabar con ella con sólo un disparo con una bala de plata al corazón.

Con esto quiero decir que en la vida lo imposible no existe, todo tiene solución, y la capacidad o impericia para darle una solución al problema, solo es cuestión de saber elegir a las personas adecuadas para estas fundamentales tareas.

Podemos definir la Seguridad según afecte de una forma u otra a nuestra vida particular, a la sociedad en donde nos desenvolvemos, o ampliando el tema hasta los lejanos estados que conlleva la globalización.

Simplemente defino la Seguridad como “LA AUSENCIA DE MIEDO”. El hombre antes de nacer tiene miedo de salir del vientre cómodo, caliente y seguro de su madre. Vive una infancia llena de disputas entre sus padres, en el colegio, en la televisión y en la calle en donde juega.

Tiene miedo. Crece con mas violencia, que dimanan de los mismo lugares pero que por su edad tienen que compaginar con el proceso cambiante de sus hormonas, con su pubertad, con el cambio que eso supone para su futuro, así como la competitividad que se va creando en su interior para poder subsistir el día de mañana como una persona independiente, fuera de la seguridad que le proporciona el propio hogar. Sigue con temor.

Comienza a trabajar y sufre en sus carnes el latigazo de las injusticias, de las envidias de jefes, compañeros y subordinados, de la presión para que se corrompa, del canto a la ineficacia que pregonan sus socios, los amiguismo, los enchufes,…si tragas asciendes, si eres honrado te perseguirán, si permites las facturas falsas te premian, y si no tragas con la malversación te califican de conflictivo e indisciplinad, y te clasifican en el perfil mas bajo de la institución o empresa.

Tensión, miedo, ansiedad. Y tu vida sigue malviviendo hasta que te hacen mayor, aunque no lo seas. Y tienes miedo a tu jubilación y a caer enfermo. Estás solo y te asustas. Y tienes miedo a morirte. En fin vives con miedo a la vida y con miedo a la muerte. Eres una persona INSEGURA. El hombre vive con miedo a la soledad, a ser rechazado por los otros, miedo a ser criticado o reprendido en el trabajo, miedo en sus relaciones cotidianas, miedo a su matrimonio, miedo por tus hijos, miedo a la enfermedad.

Si a todo esto añadimos, terrorismo, bombas que explotan, guerras por todas partes, niños hambrientos, inmigrantes sin porvenir, carne de pederastas, drogas, mafias, etc. La mente humana es un caos y en el subconsciente se implanta subliminalmente el fantasma del miedo y la inseguridad personal. Miedo: estado de alarma o de terror. Tienes tres opciones para salir de esa emoción: lucha, huye o te paras. El miedo y la inseguridad es patrimonio de la humanidad, y curiosamente cuanto mas dinero tienes mas fobias generas.

El miedo no conoce credo, raza, religión, estatus social, patrimonio, capital, patrono, obrero, presidente o ciudadano, general o soldado, papa o cura, todos pueden ser atacados por la mayor enfermedad del siglo, y la que más muertes produce. Tulio y Demóstenes tenían miedo de subir a un escenario.

Cesar Augusto no podía permanecer en la oscuridad. La reina Isabel I huía de las rosas. Feydeau, el dramaturgo francés, no salía casi nunca durante el día pues estaba aterrorizado por la muerte. Este tipo de miedo que genera una especial y típica falta de seguridad es algo tan importante para el equilibrio de las sociedades que también deben formar parte de las inquietudes de los políticos.

La Seguridad, desde un punto de vista mas amplio, e introduciendo el componente social y publico de servicio necesario, puede definirse como: El conjunto de medidas de carácter físico y psíquico necesarias para que determinadas personas, y en cualquier situación con la que deban enfrentarse en su relación real y cotidiana, sepan actuar y reaccionar con eficacia ante situaciones especialmente peligrosas.
 

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