PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - VIERNES, 29 DE DICIEMBRE DE 2006

 

OPINIÓN / MIS COSAS

Mis cosas
 


ADE
ade
@elpueblodeceuta.com
 

No hay nada más bonito que la familia unida // Atada por los lazos del amor // Que hermoso que es vivir con la seguridad // de amar y ser amado de verdad..//. Nunca los niños españoles podrán olvidar los felices que les hicieron “Los Payasos de la tele”. Hoy aquellos niños, dejaron de ser niños para convertirse en adultos y, a pesar del tiempo transcurrido, no olvidan las canciones, que en su niñez les cantaron, Miliky, Fofó y Fosfito.

Y es cierto el mensaje que lanzaban en aquella canción, sobre la familia, porque nada hay mas bonito que la familia unida. Y uno, de un romanticismo a prueba de bombas, se emociona cuando ve una foto familiar, dando un mensaje de cariño y unidad familiar aunque la familia, sólo esté unida en la foto de cara a la galería, porque sacándoles de la foto, está más dividida que una bolsa con cinco caramelos para repartir, en un colegio de quinientos alumnos. Hay que reconocer que son una jartá de graciosos, los componentes de a foto, dando esa sensación de hermandad entre ellos que, en verdad, no se creen ni ellos mismos. Lo juro, por todo lo jurable, cuando la he visto, he salido corriendo para coger el tarro de las lágrimas de emociones fuertes y derramar para de ellas, en el mismo. He sentido el libido de la emociones fuertes. ¡Cuanta falsedad, cuanta mentira, cuanta hipocresía!.

Si hace nada, menos de los que algunos puedan pensar me dicen, por un suponer, que iba a ver esa foto con toda la familia unidad por los lazos del amor, no me lo hubiese creído ni aunque me lo hubiesen jurado. Hubiese pensando que era un mal chiste, contado por algunos de esos que juegan a fastidiar a los demás. Porque es que, el asunto, no tiene razón de ser y, aún, observándolo desde un punto totalmente objetivo sin dejarnos llevar por las emociones, analizándolo con toda la frialdad del mundo, no se encuentra explicación alguna que se bese la mano de quien meció la cuna. Esto es superior a mis fuerzas y, sobre todo, a la credibilidad que me pueden dar algunos personajes, convertidos a personajillos vulgares, simples ídolos de pies de barro que se pueden comprar en cualquier tienda de “todo a cien”. Y todo por qué. Esta es la pregunta del millón que, por cierto, no tiene ninguna dificultad para ser contestada. La respuesta exacta es, simplemente, por una pequeña parcela de poder. Siento vergüenza ajena.

Y siento vergüenza, de no haberle hecho caso a la sabia de mi abuela, cuando me decía aquello de que “son los mismos perros con diferentes collares y, esos, no se muerden entre si”. Hoy, seguro, no volvería a hacer lo que hice, ni a defender lo que defendí. Hoy, si el tiempo se pudiese volver atrás, con toda seguridad hubiese aceptado lo que me ofrecieron y, por supuesto, no me hubiese jugado todo lo que me jugué, que fue más de lo que muchos se puedan imaginar. Y todo para qué. Pues, simplemente para ver con estos peazos de ojos que se tienen que comer los asquerosos de los gusanos, lo que estoy viendo y viviendo de primera mano. Todo es mentira. Todo es un engaña bobos porque, al final de cuentas, todos forman una piña de mentiras, traiciones, falsedades e hipocresía que arreglan, entre ellos, con un apretón de manos, mientras con la otra tratan de darse la puñalada de Bruto. ¡Que familia!.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto