El delegado del Gobierno, Jenaro García-Arreciado, anunció
ayer que el representante del PP en el Senado, Juan José
Imbroda, rompió formalmente las negociaciones que se habían
iniciado con el Ministerio de Administraciones Públicas
respecto a la solicitud de Ceuta y Melilla de incrementar
sus competencias.
“El cartero solo llama dos veces en el cine. Están esperando
una contestación que no se va a producir y que saben que no
se producirá porque el señor Imbroda en el pleno del Senado
de la semana pasada, comunicó en su nombre y al parecer
también en nombre de la representación de la ciudad de
Ceuta, la decisión de ambas ciudades de dar por terminadas
las negociaciones con el Gobierno”, indicó.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Jesús Vivas,
aseguró a El Pueblo que esperará la respuesta del ministro
de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, tal y como se
comprometió en la reunión celebrada el pasado 30 de
noviembre. Vivas afirmó que desde el Ministerio de
Administraciones Públicas se está aprovechando el contacto
que mantuvo el presidente de Melilla para “desatender las
peticiones” de las ciudades autónomas. El presidente
considera “poco serio” que la ruptura de las negociaciones
con el MAP se deban a las palabras de Imbroda. Vivas
califica de “excusa” el mensaje que transmitió ayer el
delegado del Gobierno, quien arremetió contra la postura de
la Ciudad Autónoma, que tildó de “tacticista” y
“electoralista”. No obstante, Vivas señaló que esta
negociación se inició hace un año cuando el presidente del
Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, visitó la ciudad
autónoma. “En el fondo se trata de que las ciudades
autónomas mejoren sus competencias y su financiación. Lo que
me gustaría destacar es que esta situación no dará pie de
ninguna manera a que entremos en colisión los gobiernos de
Ceuta y Melilla que hemos asumido esta actuación de manera
compartida y compartida por los intereses generales. Lo que
me gustaría es poder aplaudir es que ha habido una postura
sensible y justa por parte del Gobierno de la Nación”,
indicó.
Arreciado, por su parte, se mostró prudente a la hora de
calificar la posible discordia interna en el PP. “No quiero
hablar de los problemas internos dentro del PP ellos ya lo
hacen con los gestos muy explícitamente. Creo que la idea
inicial eran dos estrategias distintas y creo que una se ha
impuesto sobre la otra con lo cual se está viendo muy
claro”.
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