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España y Marruecos culminaron ayer el acuerdo para la
repatriación de menores no acompañados a este país con
garantías jurídicas y mecanismos para velar por la
protección de derechos, según informó la secretaria de
Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí.
Rumí asistió, junto al secretario de Estado de Seguridad,
Antonio Camacho, a la VIII reunión del Grupo de Trabajo
Permanente Hispano-Marroquí- sobre Inmigración que se
celebra en Rabat, en la que se abordaron cuestiones sobre el
control de los irregulares, las contrataciones en origen,
así como los menores no acompañados.
Ambas partes han culminado los trabajos relativos al texto
del acuerdo, aunque aún no son públicos los términos del
mismo. Rumí ha explicó que se procederá a su conclusión “en
las próximas semanas” recordando que, “tanto Marruecos como
España tienen firmados todos los tratados internacionales de
protección del menor”.
Además, en las próximas semanas, ambos países firmaran un
convenio para iniciar las obras de los centros de formación
y desarrollo para menores en situación vulnerable. Estos
centros se construirán a partir del próximo año en zonas que
favorezcan el desarrollo local del entorno y contarán con un
presupuesto inicial de 2,7 millones de euros.
Aumento de repatriaciones
Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad, Antonio
Camacho, precisó que el número de inmigrantes en la llegada
de irregulares a Ceuta y Melilla procedentes de Marruecos se
ha reducido en un 64 por ciento, de enero a noviembre.
Además, Interior cifra en un 228 por ciento el aumento de
repatriaciones de menores magrebíes en el período que va de
enero a septiembre, pasando de 21 el año pasado a 69 en ese
mismo período de tiempo.
En cuanto a las redes mafiosas que trafican con seres
humanos, ha crecido en un 20 por ciento las desarticuladas
en Marruecos y que tienen por destino de su actividad el
territorio español. En este sentido, España y Marruecos han
creado un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) entre las
Fuerzas de Seguridad de los dos países para luchar contra
las mafias que intentan introducir menores.
El otro ámbito de cooperación policial tendrá por destino la
fachada atlántica, por donde se ha detectado en los últimos
tiempos que crece la actividad de la inmigración ilegal.
Todo ello, hizo afirmar ayer en Rabat al secretario de
Estado de Seguridad, Antonio Camacho, que la colaboración
con el Reino alauí es “positiva”, destacando que la política
para enfrentar la inmigración ilegal del Gobierno española
tiene carácter “integral”, tanto en Europa como con respecto
a África.
Contrataciones en origen
Las contrataciones de trabajadores en origen fue otro de los
aspectos abordados en el encuentro. Según datos oficiales,
en los últimos años se ha puesto de manifiesto un progresivo
aumento de contrataciones en origen, en concreto del 145 por
ciento (un total de 2.741 trabajadores marroquíes a 30 de
septiembre). Rumí espera que estas contrataciones vuelvan a
aumentar “de manera significativamente” el próximo año y ve
posible volver a duplicar la cifra, dada la “confianza en el
empresariado español”. El Gobierno ve estas contrataciones
como un factor preventivo de la inmigración ilegal, dado que
estos trabajadores regresan a Marruecos y, al año siguiente
tienen prioridad a la hora de regresar a España en el
próximo cupo.
Según Rumí, ambas partes han constatado “con satisfacción”
el avance en todos los puntos del acuerdo en lo que se
refiere a la inmigración clandestina y aseguran que “ha
descendido de una manera muy importante”, tanto en el
Atlántico como en el Mediterráneo. Igualmente, valoraron de
manera positiva las detenciones de redes. "Se ha puesto de
manifiesto que la etapa de cooperación iniciada hace dos
años y medio, en la que algunos no creían, ha dado sus
resultados a través de una coordinación migratoria intensa",
valoró la responsable de Inmigración. En concreto, el número
de inmigrantes llegados a Ceuta y Melilla en 2005 fue de
5.261 y esta cifra descendió en lo que llevamos de 2006
hasta los 1.853.
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rabat
